Las bolsas de plástico, tan difundidas en la actualidad, son muy dañinas para el medioambiente. En Erenovable os contamos sobre cómo podemos evitar esto, ya se reciclándolas, evitando su uso o eligiendo bolsas biodegradables.
Mucho hemos hablado en nuestros blogs de la necesidad de resolver el problema de las bolsas plásticas que tanto daño ocasiona al medioambiente. Hoy nos detendremos más en detalle a conocer una de las posibles vías de solución: el reciclado.
El reciclado de las bolsas plásticas
Las bolsas de plástico están compuestas por un material termoplástico, es decir, un material que es capaz de ser repetidamente ablandado mediante la aplicación de calor y que luego se endurece al enfriarse. Por lo tanto puede ser reciclado.
Veamos qué es lo que ocurre con las bolsas plásticas luego de que las dejamos en los contenedores para reciclaje (recuerda que el del plástico es el color amarillo) :
- En primer lugar, se separan las bolsas de otros tipos de plásticos que seguirán un proceso diferente.
- Luego se suele hacer un control de calidad del material. También se realiza una comprobación del material para ver si está contaminado con residuos de alimentos. En ese caso se le deriva en primera medida a una «proceso de lavado.»
- El siguiente paso consiste en fundir el plástico. Ya hemos dicho que el fundido es un proceso rápido y sencillo.
- El plástico ablandado es empujado a través de un extrusor. ¿Qué sería esto? pues algo similar a lo que ocurre en los juegos de masa para niños, que pasan por una especie de “colador” y salen luego como si fuera spaghetti.
- Luego se le da forma al plástico antes de pasar a ser cortado con una cuchilla.
- El resultado final obtenido generalmente son unas pequeñas piezas o bolitas de plástico, las cuales se utilizan luego en la fabricación de otros productos de plástico.
Reutilizar y Reducir las bolsas plásticas
Algo importante a tener en cuenta es la básica regla de las “3 R”, Según ella, reciclar es sólo una parte de la solución. Además es fundamental es REDUCIR y el REUTILIZAR.
Cuando hablamos de reducir la idea es evitar tanto como sea posible, el uso, la entrega, o la compra de estas bolsas. Algunas sugerencias prácticas para que podamos bajar la cantidad de bolsas de plásticos
Buscar otro tipo de bolsas o equivalentes que no sean descartables. Por ejemplo, bolsas de tela o de cuerda, cestas, canastas o cajas.
Si tiene una bolsa de plástico no la tire luego del primer uso. Utilícela tantas veces como pueda. Por ejemplo, usarlas para guardar comida, para guardar ropa u otros objetos. También podemos llevarlas en el bolso de manera habitual, ahorrando así el que cada vez que vayas al supermercado o a comprar nos den una nueva (piensa también que ya en muchos establecimientos las bolsas de plástico se cobran).
Una vez rota la bolsa (de hecho no suelen resistir mucho) asegúrate de que no vaya al vertedero, y en su lugar déjala en el contenedor para reciclaje de plásticos.
Algo importante a tener en cuenta es que hay dos tipos diferentes de bolsas de plástico, según el tipo de material del que están compuestas:
Bolsas plásticas de HDPE
Polietileno de alta densidad. Son las bolsas más delgadas. Este tipo de bolsas son en la mayoría de los casos aptas para el reciclado.
Bolsas plásticas de LDPE
Polietileno de baja densidad. Son las bolsas más gruesas, las cuales normalmente no son aptas para reciclado.
Ideas para reutilizar bolsas de plástico
Existen muchas razones para reciclar las bolsas de plástico, y también existen muchas maneras de reutilizarlas. Aquí te dejamos algunos ejemplos: Puedes utilizarla también para con tus mascotas. Por ejemplo, puedes atar una bolsa de plástico a la correa con la que paseas a tu perro, así la podrás utilizar para limpiar las deposiciones que haga en la calle (todavía hay quien deja las cacas de los perros en las aceras o parques…). Otro uso que pueden tener las bosas de plástico es como protectoras contra el agua. Por ejemplo, si quieres salir a correr aunque esté lloviendo y quieres llevar tu música, puedes llevar tu discman o mp3 dentro de una bolsa de plástico para evitar que se moje. También puedes dejar bolsas de plástico en sitios estratégicos donde las puedes necesitar por razones de limpieza. Por ejemplo, en tu coche.
Para las chicas que no tienen gorro de baño, también pueden proteger el pelo del agua con una bolsa de agua, en una de esas ocasiones en las que no quieren mojarse el pelo para no tener que pasar un buen rato secándolo. Si no tienes plástico de burbujas puedes utilizar bolsas de plástico para empaquetar tus cosas a la hora de hacer una mudanza o de enviar algún producto por mensajería. Puedes meter la bolsa perecedera en bolsas de plástico bien cerradas. Conseguirás preservarla durante más tiempo y, sobre todo, evitarás que el calor del verano acelere su descomposición y atraiga visitantes inesperados. Por último, puedes reutilizar las bolsas de plástico como… ¡bolsas de plástico! No hace falta que cada vez que acudas al supermercado pidas bolsas de plástico. No solo contribuirás a ahorrar en materiales y respetar al medio ambiente, sino que también te servirá para cuidar tu economía, recuerda que en la mayoría de los establecimientos ya te cobran hasta las bolsas de plástico. A pesar de que se pueden reutilizar las bolsas de plástico de mil maneras, lo mejor será que se comenzaran a usar otros materiales biodegradables para sustituirlas. Pero parece que no interesa cuidar el planeta.
Uso indiscriminado de las bolsas de plástico
El impacto de las bolsas de plástico en el medio ambiente es enorme, más aún si tenemos en cuenta la cantidad de ellas que se “consumen” en el mundo. Hasta ahora, la acumulación de este tipo de basuras era un problema que solo afectaba a los países desarrollados, pero en los últimos años acucia también a los países en vías de desarrollo.
Por dar una cifra, tan solo en España se gastan al año el equivalente a 1.000 toneladas de bolsas de plástico. Una cifra que impresiona, ¿verdad? Aún es mucho mayor en Estados Unidos, a pesar de que en muchas zonas está instalado el uso de bolsas de papel. Cada español gasta unas 5 bolsas de plástico a la semana, lo que supone más de 200 millones al año. Multiplicado por 40 millones de personas nos salen más de 8.000 millones de bolsas de plástico al año. Y de las cuales, poco más del 20% se reciclan. Ten en cuenta también que cada bolsa de plástico produce para su fabricación 4 gramos de dióxido de carbono. Si calculamos la cantidad de bolsas (aproximadamente) que se producen en España durante un año, el resultado es el siguiente: 8.000 millones de bolsas de plástico por 4 gramos cada una = 32.000 millones de gramos de CO2 expulsados a la atmósfera. Por otra parte, las bolsas de plástico son otro de los principales agentes contaminantes de mares y océanos. Se calcula que aproximadamente un 70% de los residuos que se acumulan en mares y océanos son residuos plásticos, de los cuáles un gran porcentaje pertenecen a botellas y bolsas de plástico.
Inconvenientes de las bolsas de plástico
El plástico es un material que tarda mucho tiempo en desaparecer y, mientras lo hace, contamina la tierra, el agua y el aire. Reciclando plástico evitaremos estos efectos. Las bolsas de plástico causan un importante impacto paisajístico, en las calles, en las playas, en cualquier sitio. Asimismo, estamos cansados de ver las imágenes de los vertederos, llenos de latas, pilas y, cómo no, bosas de plástico.
El reciclaje es una de estas soluciones al deterioro del paisaje y el exceso de basura en los vertederos. Por otra parte, las bolsas de plástico que se acumulan en zonas marinas u otros hábitats puede ser confundidos por los animales de la zona con alimentos y morir por asfixia o a causa de la ingestión de plástico. Se calcula que alrededor de un millón de aves y unos 100.000 mamíferos mueren al año por culpa de la ingesta de bolsas de plástico. A la vista de cifras como estas, las bolsas de plástico ya no nos parecen tan inofensivas, ¿verdad? Por otro lado, las bolsas de plástico también suponen un gran gasto de dinero. Al no reciclar, se han de producir muchas más bolsas, con lo cual se gasta mucho más dinero (y se contamina mucho más, tanto en el proceso, como al momento de desecharlas). Existen bolsas hechas de otros materiales biodegradables que son mucho más respetuosas con la atmósfera. En cualquier caso, si vas a usar bolsas de plástico, no te olvides de reciclar.