

La eficiencia energética está cambiando la forma de afrontar el día a día en el hogar. Cada vez son más las personas que se fijan en el consumo de un electrodoméstico, en vez de tanto en el precio. Por ello, conviene saber todo sobre eficiencia energética – qué es, ventajas, problemas y eficiencia energética en España
Qué es la eficiencia energética
Antes de entrar a definir qué es la eficiencia energética, conviene poner en contexto la situación en España. Y es que son ya varios los años que lleva el asunto siendo relevante, tanto para el ciudadano, como para los fabricantes. Sin ir más lejos, desde hace tiempo, todos los electrodomésticos tienen que llevar una pegatina en la que muestren su nivel de eficiencia energética.
En la actualidad, cada vez tenemos más aparatos electrónicos enchufados en casa. Teniendo en cuenta el crecimiento de la demanda mundial de electricidad y que los recursos del planeta son limitados, los fabricantes se esmeran en innovar para conseguir una mayor eficiencia energética. Así, los usuarios no tendrán que hacer frente a grandes gastos de electricidad y podrán derivar ese ahorro a la compra de más aparatos.
Además, desde el año 2013 todas las casas que se vendan en España o se alquilen durante un periodo superior a cuatro meses, deben tener un certificado de eficiencia energética. Se trata de un documento oficial en el que se especifica el nivel de eficiencia de la casa.
La pregunta que surge entonces es: qué es la eficiencia energética. Se trata de una práctica que tiene como objetivo reducir el consumo de energía, sin que ello repercuta en la calidad del resultado final.
Un ejemplo sencillo es que una lavadora consiga lavar la ropa con la misma o mejor calidad, pero usando menos energía. O que la televisión ofrezca una mayor definición y calidad, con la pantalla más grande, reduciendo el gasto energético total.
Esta cuestión no aplica sólo a los electrodomésticos, sino también en las casas en general y su funcionamiento en el día a día. Desde la calefacción, al aislamiento de la vivienda, pasando por los métodos de iluminación empleados.
Incluso la orientación de la casa influye. La configuración de la fachada o el tamaño y composición de las ventanas. Obviamente, la eficiencia energética también se da en la industria, en el coche que tengamos, cuánto lo usemos o si somos más de transporte público.
Y es que, lejos de lo que pueda parecer, la responsabilidad de la eficiencia energética no es de investigadores o científicos. Todo lo contrario, el modo de empleo de los mismos es responsabilidad última de los ciudadanos.
Así, dejar la nevera abierta, tener la calefacción al máximo o dejar una ventana mal cerrada, suponen una pérdida tremenda de energía. Incluso si tenemos un coche eficiente pero no lo conducimos bien, daremos la vuelta hacia la ineficiencia energética más absoluta.
Sí, no es fácil ser eficiente energéticamente, incluso a veces es contraproducente. Por ello, conviene saber cuáles son las ventajas y problemas de la eficiencia energética
Ventajas de la eficiencia energética
Como es obvio, las ventajas de la eficiencia energética son innumerables. No obstante, vamos a destacar las dos más reconocibles: medioambientales y económicas
- Ventajas medioambientales – Las ventajas para el medio ambiente son evidentes. Consumimos menos energía para un mismo resultado, por lo que tensionamos menos el medio ambiente. Se reduce el uso de combustibles fósiles, presas hidroeléctricas, centrales térmicas, centrales nucleares…
- Ventajas económicas – Que ser eficiente energéticamente compensa a nivel económico, es un hecho. Al reducir el consumo de energía, reducimos también las elevadas facturas de la luz, el gas o el gasto en combustible para el coche.
Como hemos comentado, éstas son las dos mayores ventajas de la eficiencia energética. Ahora, no son las únicas. Conviene conocer también algunas de las más destacadas.
- Reducción GEI – Se minimiza la emisión y el impacto de los Gases de Efecto Invernadero
- Menos gasto energético – El gasto global, tanto en hogares como en empresas, se verá reducido de forma considerable
- Mayor independencia – Al tener menos gasto energético, el país no tiene que comprar energía al exterior, lo que reduce la dependencia de otros países y supone un ahorro considerable a las arcas públicas
- Más seguridad – Consumir menos energía permite almacenar más y tener recursos en caso de avería general o catástrofe.
- Competitividad empresarial – El dinero ahorrado por las empresas se puede reinvertir en mejorar la competitividad de las empresas a todos los niveles
- Explotación de recursos – Limitar el impacto en el medio ambiente supone reducir el deterioro del entorno y minimizar la explotación de recursos naturales
- Reducción de la contaminación – Es un hecho que a mayor eficiencia energética, menos contaminación y un menor daño ambiental
Problemas de la eficiencia energética
Aunque resulte extraño, también hay algunos problemas derivados de la eficiencia energética. Inconvenientes que, en comparación, no son tan relevantes como los beneficios, pero que conviene tener en cuenta y conocer. Estos son los problemas de la eficiencia energética.
- Obsolescencia programada – A nivel empresarial, se le da tanta importancia a la eficiencia energética y se innova a tal velocidad, que los usuarios se ven obligados a renovar sus aparatos electrónicos con una periodicidad cada vez mayor. Es lo que se conoce como obsolescencia programada.
- Ciudadanos – A pesar de no estar oficialmente demostrado, se sabe que muchos aparatos están fabricados con fecha de caducidad. Es decir, para que dejen de funcionar pasado un determinado tiempo, obligando al usuario a renovarlo.
- Fabricantes – Obviamente, los fabricantes niegan la mayor y no admiten la obsolescencia programada, pero es una realidad que los electrodomésticos y los gadgets cada vez duran menos.
Puede que este planteamiento tenga sentido económicamente. Por un lado, el usuario, al comprar un producto nuevo pero más eficiente, hace una inversión fuerte al principio, pero lo termina amortizando por su bajo consumo de energía y consiguiente ahorro energético.
Por otro lado, el fabricante, al vender más, tiene más dinero para investigar y seguir mejorando. Y, a su vez, generar mayor empleo y ampliar el número de trabajadores (recordemos que los usuarios son potenciales trabajadores). Básicamente la rueda de la economía.
El problema medioambiental es el tema principal, ya que al desechar aparatos, tras pocos años de uso, y estar continuamente fabricando nuevos modelos, se emplean recursos materiales y naturales de manera excesiva. Además, se generan muchos residuos, que a día de hoy aún no se reciclan de manera eficiente.
La eficiencia energética en España
La etiqueta de eficiencia energética es obligatoria en España. Todos los electrodomésticos deben contar con ella, pero también los inmuebles que se quieran vender o alquilar por un periodo superior a los 4 meses, deben tener una pegatina o etiqueta estandarizada.
La etiqueta de eficiencia energética muestra una calificación que va de la A a la G acompañada de un cromatismo de colores que va del verde al rojo. Para hacer esta valoración, se calcula la electricidad necesaria para el normal funcionamiento de la vivienda. Una vez calculado, se compara con la media y se determina el nivel de eficiencia del hogar.
Como la innovación ha ido a más desde su implantación, se han tenido que crear tres categorías especiales por encima de la A: A+, A++ y A+++. Buena noticia.
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