En pleno debate sobre la energía nuclear en España, ha surgido la necesidad de crear un cementerio nuclear, lo que ha generado un fuerte debate entre sus detractores y sus defensores. Pero, ¿qué es exactamente un cementerio nuclear?
¿Qué es un cementerio nuclear?
Un cementerio nuclear es un lugar preparado para gestionar de forma definitiva los residuos radioactivos, de diseño subterráneo. Estos se crean en zonas geológicamente adecuadas, que puedan asegurar una perfecta estanqueidad, pues una filtración de agua podría arrastrar isótopos radioactivos fuera del lugar.
Estos residuos serían guardados en estos cementerios nucleares durante cientos o miles de años, aunque la que se planea en España daría almacenaje para 60 años. Los objetivos de estos cementerios nucleares, denominados técnicamente Almacenamiento geológico profundo, son los siguientes:
- Asegurar la protección a largo plazo del hombre y del medio ambiente contra las radiaciones ionizantes producidas por los residuos radioactivos.
- Asegurar el aislamiento duradero de los residuos de alta actividad para el ser humano y del medio ambiente.
- Resistir el calor residual que emite el combustible gestado.
Según un experto nuclear, los cementerios nucleares son totalmente seguros. En la actualidad hay cementerios nucleares en países como Reino Unido, Estados Unidos, Francia, Hungría y Holanda. Holanda, de hecho, tiene una instalación prácticamente idéntica a la que quiere hacerse en España. Los expertos alegan que lleva siete años funcionando sin ningún incidente y muy integrada en el entorno social.
Por su parte, los detractores de la idea alegan que los residuos nucleares permanecen por cientos y miles de años, por lo que una planificación para sesenta años no garantiza nada, además que los ecologistas recuerdan que incluso Japón, el país seguramente más seguro respecto a la energía nuclear ya sufrió incidentes debido a un terremoto.
Ventajas de un cementerio nuclear
La principal ventaja de un cementerio nuclear es, básicamente, que son necesarios. No lo serían en caso de que la energía nuclear nunca hubiera sido descubierta o explotada, pero el uso de energía nuclear en el mundo obliga a tener instalaciones en las los residuos radiactivos que se utilizan en esta industria puedan ser almacenados. Recordemos que estos residuos han de ser almacenados PARA SIEMPRE.
La necesidad de cementerios nucleares o almacenes temporales crece a medida que aumenta también los residuos procedentes de esta industria. Por lo tanto, también se podría decir que es un importante foco de empleo y de inversión.
Inconvenientes de un cementerio nuclear
El principal problema de los cementerios nucleares son los riesgos que conlleva una instalación de estas características. Cualquier fallo de almacenamiento o en la seguridad podría resultar fatal. Estos fallos pueden deberse tanto a fallos humanos (por lo que se necesita profesionales altamente cualificados y especializados) o por otras razones. Por ejemplo, los terremotos de Japón de 2007 provocaron una fuga de agua radioactiva que obligó a poner la señal de alerta máxima radioactiva.
Estos cementerios han de mantenerse siempre en perfecto estado, revisarse continuamente para comprobar que no existen fugas de ningún tipo, ya que el escape de material radioactivo podría tener consecuencias drásticas. Los expertos no se cansan de señalar que son instalaciones totalmente seguras, pero el riesgo que se corre es demasiado grande. Una fuga provocaría desastres medioambientales, mutaciones, cáncer, cambios en los ecosistemas y la muerte de todo tipo de seres vivos.
El problema y, a la vez, la ventaja de estos cementerios nucleares, es que el hombre los ha hecho necesarios. Nos guste o no, una vez que nos decidimos a explotar la energía nuclear, estaba claro que en algún sitio habría que guardar los residuos radiactivos. Por tanto, el peligro no viene de los cementerios nucleares en sí, que se construyen precisamente para evitar que esos residuos «queden libres», sino de la propia energía nuclear.
Video: cementerios nucleares en submarinos
Cabe destacar que los cementerios nucleares no solo se refieren a las instalaciones que sirven para albergar los residuos nucleares. También se puede llamar cementerio nuclear a cualquier aparato o instalación que albergue en su interior energía nuclear o existen posibilidades de fuga radiactiva.
Un ejemplo de esto lo podéis ver en el siguiente documental, en el que unos investigadores visitan el submarino nuclear ruso K-27 en el mar de Kara. Según los investigadores, en este submarino nuclear, que fue hundido en 1981, existen riesgo de fugas radioactivas, y este riesgo aumentará cuanto más tiempo permanezca en el fondo del mar. Y ello a pesar de que fue sellado para evitar que sus componentes radioactivos entraran en contacto con el agua:
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