El agua es uno de los bienes más preciados de los que dispone la humanidad, hasta el punto de que es esencial para la vida. Sin embargo, el agua también puede contener y transportar microorganismos y bacterias que pueden llegar a causar graves problemas de salud (incluso altos índices de mortalidad en el tercer mundo). Afortunadamente en la actualidad existen soluciones para limpiar el agua de impurezas, como es el caso de los purificadores de agua. A continuación vemos qué son y cuáles son sus ventajas y desventajas.
¿Qué son los purificadores de agua?
Un purificador de agua es un aparato que sirve para limpiar el agua que bebemos del grifo de todas las impurezas que pudiera contener. Es probable que el agua que bebemos sea potable, pero ello no quiere decir que esté totalmente limpia de sustancias o agentes potencialmente nocivos. De estos agentes es de lo que nos libran precisamente los purificadores de agua.
Para qué sirven los purificadores de agua
Los purificadores de agua que podemos encontrar en la actualidad, utilizan principalmente tecnologías basadas en filtros mecánicos, carbón activado, membranas de separación para microfiltración u ósmosis inversa, sistemas de desinfección UV, carbonatación y electrodesionización.
En la práctica, apuntan a ablandar el agua potable y eliminar los elementos químicos y las partículas suspendidas que, a través del sistema de purificación y análisis de agua, ya tendrían que haber sido eliminados por el operador del sistema de agua, que al mismo tiempo garantiza periódicamente controles sobre los parámetros microbiológicos, químicos y físicos en la calidad del agua.
¿Cómo funciona un purificador de agua?
Los purificadores de agua se colocan directamente en el grifo o en un contenedor en la batea de la cocina, y gracias al uso de diversos filtros permiten limpiar el agua de microorganismos y bacterias, así como de agentes dañinos, suciedad o sustancias indeseadas. Son, por tanto, unos aparatos muy útiles en aquellos lugares donde la calidad del agua es menor. Beber agua totalmente pura también es el primer paso para aquellos que quieran empezar a cuidarse.
En realidad existen varios tipos distintos de purificadores de agua (lo veremos más adelante). Los más complejos suponen instalaciones en todo el hogar; los más sencillos son simples recipientes con filtro. En cualquier caso, todos sirven para lo mismo aunque en distintos niveles: eliminar las impurezas de agua para mejorar su sabor y cuidar nuestra salud y la de los que están a nuestro alrededor.
En los siguientes puntos vamos a ver algunas de las principales ventajas de los purificadores de agua, y también algún otro factor más negativo que también hay que tener en cuenta. ¡Vamos allá!
Ventajas de los purificadores de agua
Si compras uno de estos difusores para grifo que te permita purificar el agua o cualquier de los otros sistemas indicados, verás que entre sus ventajas más destacadas tenemos:
Bebes agua pura
La ventaja más evidente es que permiten el acceso a agua pura a cualquier persona que así lo desee. Esto es de especial ayuda en aquellas zonas donde la calidad del agua es menor. También se podría decir que mejoran la calidad del agua, provenga de donde provenga.
Ahora siempre tienes que revisar los filtros y cambiarlos regularmente, de lo contrario el riesgo es que se formen colonias bacterianas y ya no estarás bebiendo agua tan pura. La falta de higiene y cuidado de los dispositivos de ablandamiento de agua favorece el aumento de la carga bacteriana. La regulación sobre tales dispositivos también subraya este aspecto, centrándose en la importancia de informar al consumidor sobre este riesgo potencial.
Reduces el riesgo a enfermedades
Por otro lado, también entre los beneficios de utilizar purificadores de agua, está el hecho de que permiten a cualquier persona beber agua sin riesgos para su salud. Es decir, aumentan la seguridad y disminuyen el riesgo de padecer enfermedades o infecciones por la ingesta de agua contaminada. Por ejemplo, eliminan por completo el riesgo de padecer enfermedades gastrointestinales a causa de agua en mal estado.
Pero de nuevo debes tener muy en cuenta la higiene de estos aparatos o filtros. Sólo así te aseguras que las ventajas sean del todo reales.
Recomendado para mujeres embarazada y niños
En relación al punto anterior, el uso de estos purificadores se recomienda a cualquier tipo de persona, pero sobre todo a niños o mujeres embarazadas, o a personas que pueden ser más propensos a sufrir problemas gastrointestinales.
Son fáciles de instalar
Los purificadores de agua, en especial aquellos que son difusores que colocamos en el grifo, son aparatos simples, que no necesitan de grandes instalaciones ni de complicados sistemas de mantenimiento. Cualquiera puede tener un purificador de agua en casa, a un precio económico.
Ahorras dinero y esfuerzo
Otro de los puntos fuertes de los purificadores de agua es que, a medio plazo, salen más baratos que comprar agua embotellada. Es cierto que hay que hacer una inversión inicial en el purificador de agua y que algunos de sus componentes necesitarán ser reemplazados con el uso (los filtros, por ejemplo). También que se necesita usar más agua del grifo del agua purificada que se obtiene. Aún así, la relación calidad precio es muy superior.
Por otro lado, comprar agua embotellada para beber a diario supone cargar nuestro carro o coche con paquetes de botellas o con garrafas de cinco o diez litros, con el consecuente esfuerzo que eso conlleva. De alguna manera entonces que la instalación de estos purificadores hace que puedas también descansar un poco, en especial personas mayores o ancianas.
Mejora del sabor del agua
Por supuesto, también mejorará el sabor del agua. Todos sabemos que eso de que el agua es insípida no es cierto, y que un agua pura tiene un sabor mucho más fresco y agradable que, por ejemplo, un agua con cloro.
Colaboras con el medio ambiente
Por último, también se puede citar que el uso de purificadores de agua también reduce la producción de residuos plásticos. Si bien las botellas de plástico son reciclables, todavía hay mucha gente que no recicla y, por ello, esas botellas acaban como desechos en cualquier lugar. Los purificadores de agua ya están contribuyendo a reducir este problema.
Poder elegir el purificador que más te convenga
Lo cierto es que podemos decir que los purificadores de agua parece que se han puesto de moda últimamente. De hecho encontramos actualmente en el mercado, una amplia variedad de de purificadores y accesorios especialmente diseñados para satisfacer tus necesidades, que te permitirán elegir el sistema que mejor se adapte a sus necesidades. Además, se trata en prácticamente todos los casos de purificadores que son de alta calidad y alto rendimiento que dependiendo del sistema son además como ya hemos señalado, bastante económicos.
Estas son las principales ventajas de los purificadores de agua. Veamos ahora cuáles son las desventajas que también tienen, y que debemos tener en cuenta.
Desventajas de los purificadores de agua
No hay duda de que el uso de los purificadores de agua trae aparejados muchas más ventajas que inconvenientes, pero para tratar de ser justos y objetivos, veamos también algunos de sus puntos menos favorables o mejorables:
Siempre tiene que estar en buen estado
No es un punto negativo en sí mismo, pero para que un purificador de agua cumpla su función es necesario mantenerlo en perfecto estado, lo que implica principalmente la revisión y cambio de filtros. Los fabricantes suelen incorporan instrucciones específicas al respecto. Esto es muy importante, ya que si no se realiza un correcto mantenimiento, los filtros podrían convertirse en un caldo de cultivo para suciedad y bacterias, consiguiendo precisamente el efecto contrario al que se pretende. Se calcula que un filtro mal limpiado podría provocar la existencia de hasta 2.000 bacterias más que en un agua sin pasar por el purificador. Por tanto, si vas a usar u purificador, úsalo bien.
Gasto de agua
Las desventajas de la instalación de un sistema de purificación son bastante pequeñas, y todas están enfocadas en el gasto inicial, a menudo bastante alto. En realidad, esta compra se amortiza muy rápidamente: simplemente piense que el costo del agua embotellada para una familia promedio de 4 personas en un año es de 500 €.
Dimensiones
Otras desventajas que se pueden encontrar en la instalación de sistemas de purificación son las dimensiones, a veces demasiado engorrosas, de algunos dispositivos, y la necesidad de un cambio de filtro o mantenimiento cada 10/12 meses.
Mantenimiento de los purificadores de agua
Como ya hemos señalado en el punto anterior, los purificadores de agua deben tener un correcto mantenimiento para evitar la acumulación de bacterias y suciedades. Este mantenimiento periódico consiste en la revisión y, si procede, la sustitución del cartucho de cartón. Es recomendable seguir las instrucciones del fabricante, pero también es posible que, dependiendo del uso que le demos al purificador, lo necesitemos hacer con mayor asiduidad.
Esto es todo sobre los purificadores de agua. Esperamos haberte ayudado a entender un poco mejor los pros y los contras de estos aparatos. Desde luego, para nosotros el uso de purificadores de agua tiene muchas más ventajas que inconvenientes y creemos que, en muchas ocasiones, su precio es insignificante en comparación con las ventajas para la salud que pueden llegar a ofrecer.
Tipos de purificadores de agua
Existen diferentes tipos de purificadores de agua, adaptados a las necesidades de cada uno o, por supuesto, del dinero que cada uno esté dispuesto a gastar. Existen desde purificadores caseros, hasta pequeños recipientes bastante baratos y sencillo,s hasta instalaciones más complejas e, incluso, purificadores a nivel industrial. Veamos cuáles son los tipos más comunes de purificadores de agua que podemos tener en el hogar:
Recipientes con filtro
Son la opción más sencilla y económica a la hora de limpiar el agua de bacterias e impurezas. Sin embargo, a pesar de que cumplen en cierta medida su función e incluso logran que el agua tenga un sabor más puro, su eficacia es muy limitada y apenas se basan en un simple filtro que tan solo sirve para limpiar las impurezas más superficiales, pero no para purificar el agua completamente.
Se conocen también como jarras filtrante y es como digo el sistema de purificación de agua más utilizado para el agua doméstica , porque es muy económico y puede reducir la dureza del agua y mejorar su sabor.
El aparato tiene la forma de una jarra común, dentro de la cual hay un compartimento que contiene un filtro de carbón activado, que tiene la tarea de capturar los compuestos orgánicos y el cloro posiblemente presente en el agua.
Su funcionamiento es muy intuitivo: el agua del grifo se vierte en la jarra, generalmente equipada con un pequeño embudo, y el filtro en su interior actúa de inmediato. Después del uso, siempre es mejor guardar la jarra en la nevera y no consumir agua en la jarra después de 24 horas para evitar la formación de bacterias.
Los filtros tienen una vida limitada: deben cambiarse cada 100 litros de agua consumida, o al menos cada mes.Por otro lado, otra de sus pegas es la limitada cantidad de líquido que los recipientes pueden albergar.
Acoplados directamente al grifo
Esta es posiblemente la opción más utilizada. Se basan en una instalación muy básica en el grifo de la cocina. Se acopla un adaptador que conecta directamente con un recipiente purificador. De esta manera, el agua que sale del grifo pasa directamente al recipiente purificador, que filtra el agua y, posteriormente, ejerce de grifo (el agua ya no saldrá por el grifo, sino por el recipiente purificador que se ha acoplado.
Existen gran cantidad de aparatos de este tipo, desde pequeños recipientes de 1 litro de capacidad, hasta garrafas de considerable tamaño.
Ósmosis inversa
Este sistema debe estar conectado directamente al suministro de agua y puede ser más o menos voluminoso, dependiendo del tamaño del compartimento destinado a acomodar los residuos del proceso de purificación.
La operación se basa en el uso de una membrana especial a través de la cual se filtra el agua: las impurezas de la membrana terminan en un colector, mientras que el agua limpia fluirá directamente del grifo. Por lo tanto, el agua corriente será mejor tanto en el olfato como en el sabor así como en la calidad.
Podemos decir entonces que esta es la opción para los que quieren una casa con un agua totalmente limpia de impurezas. Se trata de una instalación más compleja que requiere de un equipo más costoso, aunque ya se pueden encontrar desde unos 200 euros. En el siguiente vídeo puedes ver cómo funciona el proceso de ósmosis inversa y cómo se aprovecha para purificar el agua de nuestro hogar.
Ablandadores de agua
Los ablandadores de agua son máquinas, no demasiado voluminosas, capaces de eliminar la dureza del agua. Para obtener el mejor resultado, estas máquinas se instalan debajo del fregadero, conectándolas directamente al suministro de agua, pero también hay modelos portátiles. El mecanismo de operación se basa en la transformación de iones de calcio y magnesio en iones de sodio, gracias a la presencia de filtros de intercambio iónico que además de descalcificar el agua también eliminan bario, níquel, cobalto y otros metales tóxicos.
Estos dispositivos son útiles si tienes demasiada agua «dura» en su hogar que puede causar, a largo plazo, el desgaste prematuro de los electrodomésticos, pero también un consumo más grande de detergentes necesarios para eliminar el halo blanco característico de telas y vajilla. El agua potable que es muy rica en sales minerales también puede causar problemas con las piedras.
Purificadores de agua caseros
También hay una última variedad, la más barata y, probablemente, la que eligen los que de verdad están más comprometidos con el medio ambiente y la calidad del agua. Fabricar tu propio purificador de agua casero no es demasiado complicado, y tan solo vas a necesitar una botella que haya de recipiente, y una mezcla de arena fina, grava, piedras pequeñas y medianas y carbón desmenuzado o carbón activado. ¿Te atreves a ponerlo en práctica o prefieres que te lo den todo hecho?
Estos son algunos de los tipos más corrientes de purificadores de agua que existen. En el siguiente epígrafe, vamos a ver cómo podemos instalar por nosotros mismos y de forma sencilla un purificador de agua acoplado al grifo.
Cómo colocar un purificador de agua
A continuación, vamos a explicar cómo instalar un filtro de caño en el grifo, un proceso que es mucho más sencillo.
En primer lugar debemos hacernos con los materiales necesarios, que consisten en el recipiente purificador, mangos o tubos conectores, tornillería, llave inglesa y, por supuesto, adaptadores para el caño del grifo y el recipiente purificador.
Por otro lado, es importante que antes de iniciar la «instalación» cerremos la llave de paso y abramos los grifos para eliminar todo el agua residual que haya quedado. Una vez hecho esto, podemos comentar la instalación sin problemas.
En realidad los purificadores de agua de caño que hay en la actualidad ya vienen con sistemas muy sencillo que se acoplan directamente al purificador de agua, y de este, al grifo. En cualquier caso, la instalación consiste simplemente en conectar el adaptador colocado en el grifo al adaptador colocado en el recipiente purificador. El recipiente purificador puede ser acoplado y colocado de distintas maneras, pero lo más común es que el recipiente quede prácticamente adosado al grifo.
La mayoría de estos sistemas, como decimos, ya son de «acoplar y usar» y no necesitan que tengamos ningún conocimiento de fontanería.
Lo cierto es que estos purificadores son bastante económicos y tienen bastante buena relación calidad/precio. La calidad del agua mejora notablemente y no necesitan de inversiones iniciales ni de realizar ninguna obra compleja.
Esto es todo al respecto de los purificadores de agua. Esperamos que la INFO os resulte de ayuda y que os decidáis por poner un agua más pura en vuestras vidas. Para terminar, os dejamos con un vídeo y unos enlaces que os podrían resultar interesantes para complementar la información del artículo.
Cada cuánto hay que cambiar el purificador del agua
A pesar de que no se manejan datos exactos, o al menos nosotros no lo hemos encontrado, los filtros de los purificadores de agua duran muchos años pero no son infinitos. Tendréis que tener en cuenta el tipo de purificador que vais a comprar o el tipo de filtro, por lo que os recomendamos que preguntéis antes de adquirirlo para que podáis valorar su durabilidad.
De igual forma, en función del tipo de filtro que tenga vuestro purificador encontraréis que tenéis que hacer un sencillo mantenimiento cada tres meses, es decir, quitar, limpiar y recolocar.
Enlaces de interés
En Erenovable tenemos muchos otros artículos que te pueden resultar muy interesantes si quieres saber más cosas acerca del agua:
A su vez, si quieres ampliar la información con artículos y libros, algunos de los que te pueden resultar interesantes son:
- Echarri, Luis. “Contaminación del agua.” Población, Ecología y Ambiente, Universidad de Navarra, Madrid-España (2007).
- Quiroz, Cristóbal Chaidez. “Agua embotellada y su calidad bacteriológica.” Água Latinoamérica. Set/out (2002).
- Pulido, Mireya del Pilar Arcos, et al. “Indicadores microbiológicos de contaminación de las fuentes de agua.” NOVA Publicación en Ciencias Biomédicas 3.4 (2005).
